viernes, 12 de junio de 2009

Bordón (Maestrazgo)

La Luna que da las horas
Que el Maestrazgo fue en tiempos tierra templaria es bien sabido por todos. Y cómo funciona un reloj de sol, pues más todavía.
Ahora mezclemos las dos cosas.

Los caballeros templarios seguían la Regla de San Benito que, entre otras cosas, imponía unas horas de rezo llamadas Horas Canónicas. Estas horas, a su vez, se dividían en Horas menores y Horas mayores. Las primeras eran: la Prima (cuando salía el sol, a las 6 de la mañana aproximadamente), la Tercia (tercera después de salir el sol, a eso de las 9), la Sexta (a las 12 de la mañana), Nona (a las 3 de la tarde) y Vísperas (a eso de las 6 de la tarde, cuando ya se iba a poner el sol).
En los siglos VI y siguientes, las horas de estos rezos las solía dar (más o menos) un reloj de sol (llamado también Reloj de misa, y que solía estar en alguna fachada del monasterio orientada al sur), y en estas horas no era obligatorio acudir a la iglesia, sino que los monjes se ponían a rezar inmediatamente donde les pillara.
Así pues, para estos rezos no había problema pues el reloj de sol les daba la hora. Ahora bien, ¿qué pasaba con las Horas mayores?. Es decir, los Maitines (a medianoche), los Laudes (a las 3 de la madrugada) y las Completas (a las 9 de la noche), y que además era preceptivo que toda la comunidad se reuniera en la iglesia.
Una de las soluciones la podemos ver en la Iglesia Parroquial de Bordón, antiguo Santuario templario de Nuestra Señora de la Carrasca, donde se halla un curioso Reloj de Luna bellamente decorado. Su funcionamiento es, básicamente, como el del Reloj de sol, pero en este caso son los rayos de la luna los que hacen proyectar la sombra. De esta forma sabían, por la noche, la hora que era. En muy muy pocos sitios podréis contemplar algo parecido a la vez que curioso.
El bonito pueblo de Bordón debe su nombre al río que lo atraviesa, y que es afluente del Guadalope. Si tenéis suerte cuando vayáis a visitarlo, y en la iglesia abierta está la señora que cuida de ella, dejad que durante un buen rato os explique el significado de la muy interesante decoración, que os hable de los templarios, y que os cuente alguna leyenda.
Merece la pena sumergirse en su pozo de sabiduría y retroceder, aunque sea por poco tiempo, al pasado medieval de la localidad. Desde aquí mi agradecimiento por esos momentos mágicos que nos hizo pasar.












Nota: Abstenerse comentarios tipo "¿Y cuando estaba nublado?".

Nota 2: La división de las horas las he sacado mezclando la información de unas cuantas webs "fiables", ya que ni entre los curas se ponían muy de acuerdo en las divisiones de las horas canónigas ni en el horario de las mismas. Pero para el contenido de la historia, es algo que no tiene relevancia.

No hay comentarios: